EE. UU. hunde barco proveniente de Venezuela; acusa transporte de droga en el Caribe
Según la Casa Blanca, forma parte de la estrategia de "máxima presión" contra el gobierno de Nicolás Maduro.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que fuerzas armadas estadounidenses destruyeron un barco que había zarpado de Venezuela, asegurando que la embarcación transportaba un cargamento de drogas. El incidente ocurrió en aguas del Caribe y, según la Casa Blanca, forma parte de la estrategia de "máxima presión" contra el gobierno de Nicolás Maduro.
"En los últimos minutos, literalmente hundimos un barco cargado de drogas, con mucha droga […] Ocurrió hace unos momentos y nuestro gran general, jefe del Estado Mayor Conjunto, quien ha sido increíble, incluyendo lo ocurrido en Irán, eliminando cualquier potencial nuclear durante mucho tiempo", declaró Trump en un evento en la Casa Blanca.
El mandatario acusó que "mucha droga entra a nuestro país desde hace tiempo" y que "esto salió de Venezuela, en grandes cantidades".
El secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó desde Ecuador la operación, describiéndola como un "ataque letal" contra un "barco de drogas que había salido de Venezuela". Añadió que la embarcación estaba operada por una organización catalogada como "narcoterrorista".
El operativo se enmarca en la presencia de una flotilla militar estadounidense en aguas internacionales cercanas a Venezuela, compuesta por destructores de misiles guiados de la clase Arleigh Burke (USS Gravely, USS Jason Dunham, USS Sampson), el crucero de misiles guiados USS Lake Erie y el submarino nuclear USS Newport News. Además, participan los buques anfibios USS San Antonio, USS Iwo Jima y USS Fort Lauderdale, con más de 4,500 efectivos, incluidos marines.
La Casa Blanca, a través de su vocera Karoline Leavitt, recalcó que "el presidente Trump ha sido muy claro y consecuente. Está dispuesto a utilizar todos los recursos del poder estadounidense para impedir que las drogas inunden nuestro país y llevar a los responsables ante la justicia".
Esta acción ocurre días después de que Washington designara al Cártel de los Soles como organización terrorista global y aumentara a 50 millones de dólares la recompensa por la captura de Nicolás Maduro.
Desde Caracas, el presidente venezolano calificó el despliegue estadounidense como "la más grande amenaza que se haya visto en América en los últimos 100 años", denunciando que se trata de "una amenaza extravagante, injustificable, inmoral y absolutamente criminal".
Maduro acusó a Rubio de ser "el señor de la guerra" y de querer "manchar las manos" de Trump con "sangre venezolana". Sin embargo, matizó que no guarda animadversión personal hacia el presidente estadounidense, a quien definió como "inteligente y audaz" y sostuvo que ambos comparten el anhelo de la paz.
Ante lo que consideró "máxima presión militar", el mandatario venezolano anunció la activación de la "máxima preparación" para la defensa, asegurando que su país cuenta con una estrategia "eminentemente defensiva" desarrollada en los últimos veinte años.
"Nosotros estamos en un periodo especial de preparación y en cualquier circunstancia vamos a garantizar el funcionamiento del país, nos toque o no nos toque", afirmó, asegurando que 8.2 millones de personas están alistadas para defender el territorio.
El líder venezolano pidió además a Naciones Unidas y a su secretario general, António Guterres, que intervengan de manera urgente frente a lo que calificó como un riesgo de "guerra completa en todo el continente".
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